Empiezo por el final. Eran cerca de las ocho, en la agonía de la tarde, cuando hablé con los organizadores del evento (Carmen, Sergio y Abel), a cada uno por separado. Y a todos les dije lo mismo: Madrid quiere eventos como este. Esforzaros en ir sacando, año a año, el FFF y el éxito vendrá solo. Porque Madrid quiere eventos como este.
Horas antes llegué a Fuenlabrada, junto a Sergio Moreno (http://elclubdelosinsomnes.blogspot.com.es/) y nuestras respectivas. Queríamos aprovechas el día. Yo tenía mucho miedo, ya que llevaba una semana malo y venía bajo mínimos al Festival (como muchos asistentes, como pude comprobar). Pero allí estábamos. Tras saludas al editor me senté a la primera charla, en la que Fernando Trujillo, Abel Murillo y otros que desconocía hablaban de la autopublicación. ¿Cuándo alguien te dice lo bueno que es un libro, tú le respondes a qué huele? Interesante y polémica.
La segunda parada era más complicada: ¿Jesús Cañadas o Somoza, Aguilera, Marín y Negrete? Bajé a escuchar al bueno de Cañadas (al que le compré el libro pero que no vi para que me lo firmara), y nos contó sus aventuras por la tierra de Lovecraft. Muy suyo, como siempre. Pronto te veo entre tus páginas (ir a Alemania me sale peor).
Mi siguiente paso fue escuchar al Rey Trasgo y sus secuaces. Se les veía orgullosos de sus trabajos. Y parece que no es para menos. Debido a mi fobia a lo inacabado, esperaré a los cinco libros para el disfrute (aunque ya leí el primero y no sé yo si la impaciencia podrá conmigo).
Luego vino la comida, en la que más de 170 personas hablamos y comentamos todo lo que estaba ocurriendo, que no era poco. Pude hacerlo con Somoza, la gente de Kelonia, Hello Friki o Alfonso Zamora. He aquí los culpables. Aplausos y Heavy Metal, como debe ser.
Ya por la tarde esperamos a que viniera Loureiro. Yo disfruté mucho con sus dos primeras novelas, y la cuarta está en casa. Según lo que dijo, sus anécdotas y casualidades, su pasajero tiene pinta de tener mucha magia dentro. No dudé en ir después a ver a Sofía Rhei, a escuchar su clase sobre creación de mundos. Más maestra que muchos de nosotros. Su sonrisa cautiva. Cómo lo hará.
Tenéis muchas más fotos de nuestro evento en el Álbum de José Luis (pinchar para verlas).
Termino como empecé: Abel, Carmen, Sergio: esto es solo el principio. Gracias por el trabajo. Una pena no haber ido a la sala a oír a los grupos, pero mi salud me lo impedía (gracias a ella he empezado a escribir esto a las siete de la mañana. Que Dio me asista).
Os saluda,
Alberto.